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jueves, 18 de enero de 2018

A POR ELLOS 2





Estúpido. Estúpidos. Estupideces. Majaderías. Españoladas. Se hace cansino soportar, día sí y día también, los desfiles y crónicas de enjuiciados y condenados por corrupción de este, ese o aquel partido; la relevancia y el énfasis que se pone dependiendo del color, y/o de las siglas del partido, cuando eso es lo menos relevante porque, lo trascendente, es el sistema que lo propició y que sigue tan vigente hoy, como ayer. Me indigné en su día, y mucho, por las reiteradas dilaciones durante el proceso judicial del caso Palau, dilaciones que a la postre han servido para que algunos salgan indemnes por prescripción del delito del que se les acusaba. El tribunal solo considera probados, por otro lado, el desmadre por valor de veinte y pico de millones, cuando se sabe a ciencia cierta que pasaban de largo de los 30; pero solo se ha podido probar lo reflejado en la sentencia y la sentencia, por tanto, es en base a esa cantidad. Más de 8 años, ocho, para presentarnos ante el final de la primera parte, porque evidentemente la sentencia la van a recurrir, con lo que entraremos en la segunda parte de la historia. En TV3, tan manipuladora y tan así como dicen los carpetovetónicos de El País y cia. dieron la otra anoche un pequeño reportaje en el que uno de los hermanos pequeños de Millet, relataba como ya desde crio este era todo un elemento: si se hacía con unos cuantos caramelos, iba a sus hermanos y se los vendía; cuando les había sacado la pasta, se ponía a llorar y a quejarse hasta que les devolvían los caramelos y él se quedaba con la pasta y los caramelos, naturalmente. Si no, ¿dónde está la gracia?  Como la sentencia no es firme es inútil hablar de más o menos años. Ya se verá. Como debe verse si el juez hace caso o no a la petición del fiscal sobre las medidas cautelares que este va a solicitar, y envía a alguno a prisión aunque la sentencia se haya recurrido. Ahora el proceso va al TS, después probablemente irá al TC y acabará en Estrasburgo, posiblemente. Mientras…pues es posible que Millet se haya muerto, que Montull este para el arrastre y no entre en prisión por cuestiones de edad y salud, que la hija de Millet, condenada a 4 años, sea absuelta o condenada a 2 años o menos, y aquí paz y después zanahoria…¿o era gloria? Claro: en la gloria que han vivido estos hijos de la gran puta. Si es cierto que dicen que Millet le tiene pánico entrar en la cárcel, pues a la cárcel con él; no sea que un abogaducho se crea que eso es una eximente ni parcial ni completa para que te metan en la cárcel por delincuente. Los corruptores, Ferrovial a través de sus dos directivos absueltos por prescripción del delito, impolutos. Así da gusto. Debe dar un gustito, que ríete tú de cuando vacías la vejiga después de aguantarte hasta que encuentras un lavabo en mitad del desierto de lavabos que te rodea, cosa que tardas siempre una media hora o así. Pues, lo de los dos perlas de Ferrovial, debe molar más aun que ese indescriptible placer que te das vaciándote del líquido elemento. 
                                                                                 
Este caso como es antinatural, es utilizado contra el movimiento independentista catalán, que es lo mismo que si yo relaciono en la misma cama a C. Ronaldo y Falete. No lo ves. Yo igual. ¿Tu si? Serás un degenerado o un culé, que es peor. Hablando de culés, van como motos mientras al Bernabéu se le conoce ya como el Hospital General de Madrid, porque todo el que entra, sale con puntos. Pero no quería meter el dedo en el ojo del españolísimo en la temporada de los rebeldísimos, porque encontraremos tristes similitudes entre la desaparición de un tal Roncero y de una tal Soraya Sáez de Santamaría y cierra ¡España! ¿O era Santiago y cierra España? ¡Ay! es que esto de ser subnormal y octopolar, tiene sus cosas. No los controlo a todos; ¿qué quieres que te diga? Hablando de descontrol: ¿Alguno ha visto a la Chuky últimamente? Sigue desaparecida desde el 21-D. Vamos a tener que elevarlo a la categoría de misterio, como misterioso es el proceder del juez Llanera, que, inopinadamente, con el argumento de haber oído a los Jordis, va el tío y decreta el secreto de sumario durante un par de semanas. Esta justicia española cada día parece más española y menos justicia y claro, Puigdemont a lo suyo: de momento está logrando imponer su tesis de que, el que debe ser elegido, es él, como sea; al tiempo que, por si acaso, ya se piensa en Puigdemont como candidato a presidir la candidatura independentista para el Parlamento europeo en las elecciones del 2.019, o bien convertirlo en una especie de representante permanente de Catalunya en la Unión Europea. Una vez ya constituido el Parlament de Catalunya de nuevo, todos quedamos pendientes de lo que se decida en Bélgica antes de que se acabe enero, que es cuando debe darse la sesión de investidura; y entonces se pueden dar dos casos: caso A): Puigdemont se presenta como candidato telemático o delegando su voto y su discurso, Rajoy recurre y el Constitucional declara la sesión de investidura “nula”; resultado: repetición de elecciones. Caso B): Puigdemont se presenta como candidato telemático o delegando su voto y su discurso, Rajoy recurre y el Constitucional declara la sesión “fallida”; resultado: hay que volver a votar con toda probabilidad otro candidato o convocar elecciones. Dos semanas, pues, de más cábalas, hipótesis, conjeturas y adivinanzas para que coman periodistas, facsímiles de estos, tertulianos, politólogos y otros adheridos al show mediático de la alta sapiencia política. Todos halaban el tono y la actitud en el discurso inicial del nuevo President del Parlament, Roger Torrent: breve, conciso, plagado de alusiones al respeto, la pluralidad del país (Catalunya), conciliador, un discurso autonomista…nada que ver con el anterior discurso de Ernest Maragall como presidente de la Mesa de Edad: directo, con alusiones a los presos y exiliados políticos, con reproches al 155 y al gobierno de Rajoy, un discurso de eminente tinte independentista y republicano. Ambos militan en Esquerra Republicana. Curiosamente a los únicos que no les gustó el discurso de Roger Torrent, ya no digamos el del hermano de Pascual Maragall, fue a la Arrimadas y a la bancada del PP, a los que es evidente que lo que les interesa políticamente es mantener viva la llama de la confrontación, la discordia y la bronca, que es de lo que viven en Catalunya. Algo verdaderamente penoso y lamentable para aquellos que se dicen catalanes y defender los intereses de todos los catalanes y amar tanto Catalunya y blablabla, es verlos mudos y circunspectos cuando todo el hemiciclo canta el himno de  Catalunya, Els Segadors, esa Catalunya que dicen amar tanto, mientras ellos (C´S y PP) se mantienen en un ominoso silencio. Y no porque no se sepan la letra del himno, que me la sé hasta yo y me emociona cantarlo, como lo ha hecho recientemente en las manifestaciones a las que he asistido y de forma espontánea lo cantaba la gente. De veras que es más bonito que el a por ellos, oe, o el yo soy español, español, español. Así que bota rebota y en tu cara explota. Esto último es una parida de una de mis ocho complejas personalidades: tendré que hacer un seminario o algo para aprender técnicas de autocontrol como octopolar del mundo incivilizado que soy.
                                                                               
Y a ver cuando te espabilas, con esa cara aljofifa que tienes, que esa cara tendría que estar penada por la ley sacarla a la calle; ya te han cobrado la cuota del carnet de Ómnium, pero no te han mandado aun el carnet: ¿Qué pasa neeeeenn?    


A más ver     

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