Yo me pregunto a mí mismo, y no hace falta que lo haga desde
la perspectiva independentista sino por puro y simple sentido común, si alguien
se cree, realmente se lo cree, que porque condenen a Junqueras, los Jordis y compañía
a 3.000 años de cárcel ¿los independentistas vamos a volver al redil de la
borregada y vamos a hacer como si nunca hubiese pasado nada? Decía el otro día
el Rajoy que lo que tenemos que hacer es elegir a alguien para presidir la
Generalitat sin cuentas con la justicia y, a partir de ahí, oiga usted,
volvamos a una situación “normal” desde la que podamos construir…pero vamos a
ver, pedazo de gilipollas ¿es que te crees acaso que los más de dos millones de
catalanes que nos hemos enfrentado a un puto facha de mierda como tú, somos
como tú de gilipollas? Que tú no tengas ni vergüenza ni dignidad y que te de
igual que te la pisoteen, no quiere decir que nosotros no la tengamos y, por
que sí, de la noche a la mañana o porque a ti te dé la gana, vamos a olvidarnos
de todo y actuar como si lo vivido nunca lo hubiésemos experimentado, ni
sentido ni padecido. Igual te crees que tu palabra para nosotros tiene algún valor.
Puedes creértelo, claro, porque eres gilipollas y eso es lo que pasa cuando uno
es gilipollas: que se cree hasta sus propias estupideces. Déjame adivinar…para
ti la normalidad debe consistir en que volvamos al estadio autonomista, en el
que te propongamos negociar y tú te dediques a hacer lo que has hecho durante
los últimos 10 años, que ha sido obstinarte en negarte a negociar absolutamente
nada con los catalanes. Porque antes de que apareciera en el contencioso la
palabra referéndum, apareció la palabra consulta; y antes de esta también te
negabas igualmente a hablar de nada, cuando ni tan siquiera había sobre la mesa
ninguna consulta ni referéndum ni nada que remotamente se le pareciera. Eres la
negación en persona de cualquier clase de negociación política, porque eso no
forma parte de tu cultura fascistoide, te sientes más cómodo en el no a todo y
de imponer antes, siempre antes que acordar algo, porque acordar implica ceder
y eso es algo contracultural para ti, algo inaudito, impensable y pecaminoso. Así
que, volver al estadio ese autonomista, para nosotros, es volver a vérnosla con
un tipo como tú, con el que no se puede hablar ni negociar nada. ¿A esa
normalidad quieres que volvamos? ¿A eso lo llamas tú normalidad desde la que
construir? Pues has tenido años y más años de normalidad y no es que te hayas
caracterizado precisamente por tus ansias de construir algo al respecto. Puedes
engañar a todos los que están deseosos de dejarse engañar; pero, a nosotros,
no. No es que seamos más listos que el hambre. En absoluto. Es, sencillamente,
que por un lado vemos y por otro no olvidamos lo que hemos visto y tu palabra,
para nosotros, tiene menos valor que las babas de un caracol. Hechos son
amores, que dice el dicho, y no buenas razones. Y tú, de hacer, lo único que
has hecho es traernos hasta este punto con tu actitud, tus negativas y tu
cerrazón porque tú, Mariano Rajoy Brey, eres sinónimo de la anti política.
Estoy acabando de leer el libro de Fernando Rueda, La Casa
II. Un libro sin duda de cabecera para todo aquel que quiera estar más o menos
al corriente de lo que pasa en este país. Y este hombre no es sospechoso
precisamente de ser un recalcitrante independentista, sino un firme defensor
del derecho de la gente a estar informada. Pues bien, de entre la muchas cosas
que dice, algunas verdaderas perlas del periodismo de investigación, te acusa a
ti, ya en tu época de ministro del interior con tu amigo Ansar, y
posteriormente como presidente del gobierno español, de no haber hecho absolutamente
nada, pero ni lo más mínimo, para que haya existido la más remota posibilidad
de llegar a unos mínimos de colaboración entre los diversos cuerpos de seguridad
del estado en la lucha contra el terrorismo, que nos ha llevado a desastres
como el 11-M o el más reciente como los atentados del pasado 17 de agosto en
Barcelona y Cambrils. Zapatero, que no es que haya sido santo de mi devoción tampoco,
en eso te ganó de calle, porque él sí que creó un cuerpo operativo de colaboración
entre el CNI, la Guardia Civil y la Policía Nacional, que tuvo como resultado
acabar con los atentados de ETA. Esto ni es una elucubración mental mía ni está
sujeto a ninguna interpretación política condicionada por ningún tipo de ideología,
son, sencillamente, unos hechos contrastados empíricamente. Tu nulidad, tu
ineptitud y tu incompetencia han costado muchas vidas. Y no lo digo yo, lo dice
un hombre que lleva muchos años investigando las cloacas del estado. Pero, reconozcámostelo,
tu inutilidad no es total ni plena: para enriquecerte a manos llenas tú y a los
tuyos, para robarnos, para eso si que sirves, y no se te da nada mal, visto lo
visto. Has preferido ponerte al lado de la banca, vaciarle la hucha a los
pensionistas para salvarles el culo a los banqueros; eso sí: mirando para otro
lado cuando estos han proclamado que nos vayamos olvidando de que devuelvan el
dinero prestado/regalado para rescatarlos, como te has vuelto a poner de su
lado con el tema de los desahucios, de las preferentes, etc. Con más morro que
un oso hormiguero has salido por la caja tonta para decirnos a los españoles
que, chicos, ¿sabéis qué se me ha ocurrido?: que si queréis pensiones dignas el
día de mañana, iros haciendo un plan de pensiones privado. Y aquí paz y después
gloria, ¿verdad? Pues ahora parece ser que los nuevos sublevados/sediciosos/rebeldes/antisistema,
son los alborotadores pensionistas que se han puesto en pie de guerra y te lo
van a demostrar, otra vez como vienen ya asomando últimamente, el próximo sábado
17. Y, personalmente, tengo que confesarlo, me han sorprendido y sorprendido
muy gratamente, y me alego y congratulo fervientemente de haberme equivocado,
porque no veía posible que se organizaran y se levantaran de sus sillones para
reclamar lo que les pertenece por derecho, allá donde se consiguen las cosas:
en la calle. Ya sé que eso de que la gente salga a la calle a reclamarte sus
derechos no te gusta, sinónimo de que ese es el camino correcto, sin duda
alguna. Sin ninguna duda. Y vuelvo a decir lo mismo que dije el otro día en relación
a las reivindicaciones feministas del pasado 8 de marzo, que también nos atañen
a los hombres como maridos de nuestras esposas, padres de nuestras hijas e
hijos de nuestras madres: esto de los pensionistas no solo atañe a los que
cobran las pensiones, nos atañe a todos porque todos somos potenciales futuros
pensionistas que estamos cotizando, a día de hoy, para cobrar mañana. Ojalá la
gente se levante, sector a sector, colectivo a colectivo y con ellos el mayor
numero de conciencid@s posible, y te jodamos bien la vida, cacho cabrón.
Y por hoy solo un apunte más para dejarlo claro: en relación
a las declaraciones en una conversación privada del diputat de Esquerra Republicana
Lluís Salvadó que destapó Antena3, conversación que por muy en clave privada
que se haya hecho no quita lo que significan del trato hacia las mujeres por
parte de ese individuo, lo tengo no claro, clarísimo: ya está tardando su dimisión
o su cese. Pero ya. Otra cosa es que, a su vez, tenga derecho, como tiene, a
demandar a Antena3 por hacer pública una conversación privada, extraída además de
forma subrepticia por formar parte de las grabaciones que constan en uno de los
sumarios que se siguen contra los independentistas catalanes, en su caso por la
organización del referéndum del 1-O, uno de tantos, y que además no tienen
ninguna relación con el objetivo de la demanda. Una cosa no quita la otra: él
tiene todo el derecho a demandar a Antena3; y yo tengo todo el derecho a
exigirle que abandone la política pero a la voz de ya. Porque es que además hizo
esas declaraciones sabiendo, como sabía perfectamente, que podía estar siendo
espiado en sus conversaciones privadas por el móvil. Era consciente, plenamente
consciente, por lo que no me cabe otra explicación de que este tío es un
completo imbécil. Y me da igual que lo haya hecho en clave privada y no le
quito que tenga derecho a su privacidad y a hacer con ella lo que quiera, como
si se quiere convertir en travesti y llamarse Ignacia en la intimidad. A mí no
me representa ningún tío que piense ni en privado ni mucho menos en público, lo
que piensa este individuo sobre la capacitación de las mujeres para optar a un
cargo público en función de sus tetas. Ni en cientos de siglos, puto
gilipollas.
Y para vuestra información una nueva clase de derecho constitucional
del que se os veta en España por parte del señor Javier Pérez Royo, en este
caso sobre la interlocutoria de ayer del juez Llarena en relación a Jordi
Sánchez y su solicitud para asistir al pleno de investidura, ahora ya
suspendido por el President del Parlament: https://www.ara.cat/opinio/Javier-Perez-Royo-Ignorancia-inexcusable_0_1975602519.html
Parece mentira, pero esto es el ABC de nuestro sistema político que el juez Llarena
parece o bien desconocer o, en mi modesta opinión, pasárselo por el arco del
triunfo.
A más ver
El maleficio de Paquita la culona es como el virus que ningún programador resuelve.
ResponderEliminarEntiendo su ira don José y la comparto,de manera transversal,que es un término que mola.
La hipocresía y la sumisión a esta barbarie domina el mundo, el país y cada esquina de los barrios.
Y ante la desesperanza le dicen a un@ sus amig@s que no se amargue.
No.
Me voy a poner a dar palmas con las orejas,no te jode.
Gracias. Siempre un placer leerle.
Gracias ti Sonidera. Y respecto a lo que te dicen, mi abuela decía que no había que hacer caso a medios días, habiendo días enteros...Un saludo.
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