Un completo reportaje cronológico de todo un día histórico para Catalunya, que desmonta el relato de los Llarena y compañía y que, justa y precisamente por ello, dudo de que lo admita como prueba de la defensa ningún tribunal de este país y, sin embargo, nada hay más clarificador que las imágenes y testimonios aquí recogidos, desde la espontaneidad de la gente que a primera hora, antes de ser convocadas, ya se agolpaban ante la puerta de la Conselleria de Economía, hasta el intento fallido de entrada y registro en la sede la CUP por parte de la policía, sin una preceptiva orden judicial. Los del imperio andaban tan "calentitos" con el tema referéndum, que la noche anterior desde la piadosa tele de la conferencia episcopal se pedía al Kim Yon Un que bombardeara Catalunya, que en eso consiste, dígome yo, para esa gente tan pretendidamente católica la libertad de expresión: para poder expresar todo su odio y su rencor, toda su chulería y su prepotencia, de repente desnudada su impotencia para evitar lo inevitable: el referéndum que se les venía encima, a pesar de que para Rajoy no se celebraría porque no habían urnas, ni papeletas, ni censo, ni nada de nada.
Solo esto por hoy, que el video ya dice lo demás...
A más ver
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