Ahí los
llevas: a ese trío calavera de cacareo en cacareo con sus almas
cortocircuitadas, propias de una vida llena de embustes mayúsculos,
aportándonos su no es no a los otros no que llevamos 5 años escuchando en
cuanto al monotema catalán. Cinco años de negativas a todo y ninguna
alternativa, ni una mesa negociadora, ni un atisbo de atender y dar respuestas
a las 46 propuestas catalanas desde Moncloa http://estaticos.elperiodico.com/resources/pdf/0/8/1461170896180.pdf
; y el coro de momias políticas, artífices en primera persona de la política
que hemos padecido en las últimas décadas, aquel de los GAL, el otro de la
guerra de Irak y el andoba de la desaceleración económica, impartiendo
magisterio democrático y sumándose al coro de gente responsable y mesurada, que
anda exigiendo la suspensión del estado autonómico catalán, expropiar y
españolizar a la moreneta, los tanques en las calles de Catalunya y unos
boquerones en vinagre. Quien tuvo, retuvo, dicen. En este caso, retienen la
roña moral, los crímenes de estado, una guerra injustificable con razones
falsas y una caraja impropia de un presidente de gobierno que, mientras el
suelo se hundía bajo nuestros pies, decía que eso: que vivan los brotes verdes.
Al mismo rollo de españolear se le suma, obviamente, el otro pretencioso
salvapatrias naranja, al que se le añade ese radical chavista bolivariano de
nuevo cuño que responde al nombre de Pedro el rojo carmesí. Propuestas de
algunos de estos personajes para desatascar el atasco: cero patatero. Pero no
ahora: antes tampoco. Ante una demanda colectiva de más de dos millones de
ciudadanos del territorio español, una demanda pacifica y sostenida en el
tiempo durante los últimos cinco años, la acción del gobierno de Madrid se ha
circunscrito a denunciar en los tribunales y usar a sus compinches entogados
cuanto han querido, a falsificar pruebas contra los representantes de esos
ciudadanos, a mentir una y otra y otra vez anunciando una voluntad de diálogo
que ha sido en todo momento y es del todo punto falsa, como lo demuestra el
hecho de que no haya habido nada, absolutamente nada que haya propuesto Moncloa
ni bueno ni malo con lo que negociar: nada, salvo esperar que el ruido se
apagara solo, como le gusta al badulaque ese que está de okupa en Moncloa. Si
algo ha demostrado este conflicto nacido, repito por enésima vez, de la necedad
política de un torpe mayúsculo, es que Rajoy es el paradigma de la anti
política, un negado para afrontar grandes temas de estado, que no discuto que
sirva para tomar notas en el registro ese de la propiedad, pero esto le viene
no grande: lo siguiente. No se pueden dirimir los asuntos serios, como quien
dice entre mano y mano de póker, envueltos en una humareda de puros y olor a
whisky con los cuatro amigotes del TC. Panderetas, circo, saltimbanquis,
trapecistas y payasos los hay por doquier, aquí, allá y acullá. Ante la nueva
fanfarria que anuncia la misiva de Moncloa a los ayuntamientos catalanes que, o
hacéis lo que dice el TC o habrá pan-pan en el culito, algunos de estos no
sellan la entrada de la carta amenazadora y se hacen los longuis. Ojos que no
leen… funcionario que achilipú, de remanguillé.
Es lo que
pasa cuando alguien se cree que, para alcanzar un fin, todo vale. Eso parecía
al menos cuando el percebe pontevedrés aplicaba su razonable, responsable y
mesurado no a todo a Zapatero por un puñado de votos, llegando incluso a
dinamitar el pacto antiterrorista existente entre PP y PSOE para emborronar las
negociaciones que condujeron al fin de ETA; no a todo y naturalmente y cómo no,
no al nuevo Estatut catalán por otro puñado de votos; y así, ya instalado en la
cresta de la ola de su mayoría absoluta después de tanto no, que visto lo visto
resulta muy constructivo, siguió con su no gobernando durante 4 años, en los
que no aceptó modificación alguna en sus proposiciones de ley, acusando a los
demás de no querer negociar porque no aceptaban las propuestas/imposiciones del
PP. Tomad nota, porque esa línea política ha hecho presidente de un país a todo
un sociópata imbécil de marca mayor y con denominación de origen. Y luego
hablan de populismo; ¿pero a estos, quienes los han votado? ¿La crème de la crème; the high society; la
intelectualidad? Vamos nene, no me jodas. ¿Y cómo ha convencido a esos ocho
millones de gente de alta cuna y prosapia, con sus mensajes profundos solo al
alcance de tan brillantes mentes, con su dulce encanto de hombre maduro y
apolíneo, con esa labia, que si le vas a comprar una tele te vende la tele, un
portátil, una lavadora y una plancha y ni te has enterado? O sea…Mafalda, tenés
razón, boluda: ¿quién hizo el manicomio redondo?
Anoche
Piqueras entrevistó a Pedro Sánchez. Inopinadamente, sin que viniera a cuento
pero es que hay que dejar el mensaje subliminal que asocie ahora también a
Pedro con Venezuela, Maduro y la revolución bolivariana, le preguntó al
secretario general socialista por la situación venezolana. Y digo yo que también
le podía haber puesto un video sobre Palestina y de cómo tienen a todo ese
pueblo de reprimido, acribillado y masacrado literalmente nuestros “amigos” los
israelíes, esos que se pasan las resoluciones de la ONU por ahí mismo, como los
derechos humanos y todo lo que se salga de las narices ante el ignominioso
silencio “amigo”. O también le podía poner un video sobre los derechos de la
mujer en el país de los otros “amigos” que tenemos en Arabia Saudí. O…no,
calla, animal: Venezuela. Venezuela que algo queda. Es uno de esos malos tragos
que tiene que pasar un candidato en territorio comanche y Pedro lo sabía. Será el
verano, o que me gusta tanto el Cucumis melo; pero siempre que pienso en este
hombre mi mente me la juega poniéndome la imagen de un melón sin catar aun. Es la
X por despeja de la ecuación. Ya se le asoman atisbos de su izquierdismo
edulcorado, que más que rojo parece rosáceo, un color el rosa que guarda relación
con el encanto, la cortesía, la sensibilidad, lo sentimental, lo etéreo y
agradable. A eso quiere sonar el nuevo líder socialista, que le hace guiños de
cariño a los antiguos votantes socialistas pasados a las huestes de Podemos,
que dice querer estar a bien con todos y echar a Rajoy entre todos los demócratas
de buena voluntad. Solo le falta el traje marinero, el rosario y el librito y,
hala: a hacer la primera comunión, nene. Qué guapo va, míralo, qué mono. Si no
fuera porque, en esa línea, se lo van a comer con patatas… o eso o más pronto que
tarde claudica y comienza a dar pequeñas puñaladitas traperas a su nuevo
ideario izquierdoso para “no asustar a los mercados”, o cualquiera de esas
vainas que siempre tienen a mano para justificar sus donde dije digo, dije esternocleidomastoideo.
Su propuesta para desencallar el asunto catalán es la misma que Rajoy: ninguna,
porque la solución que ofrece pasa por una nueva configuración del estado
español y, con este PP, es imposible ver una España federal. Pero bueno oye:
soñar es gratis. O no. Porque…aquello que soñamos muchos por estas latitudes,
no nos está resultando ni nos va a salir gratis. Pero… ¿y si fuera posible; y
si mañana nos levantamos y fuese una realidad que nunca más nos gobernará la
derecha española fascistoide, podrida y reaccionaria de España? Ya sé que la
derecha catalana angelitos no son, precisamente, pero con el tema Pujol su
único nexo de simpatía entre la ciudadanía lo mantienen por el proceso
independentista y, en unas nuevas elecciones, caerán incluso por debajo del PP
en escaños en el Parlament.
¿Y si fuera
posible…?
A más ver
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