LA SARTEN

Es que la cosa siempre está en cómo te presenten el plato a degustar. Me explico: El Periódico de Catalunya, emisor de la controvertida nota de la CIA que resulta que después no era de la CIA sino de una de las tropecientas agencias secretas yankees (National Counterterrorism Center-NCTC-, según El Periódico), ha seguido una línea editorial, desde que yo conozco la existencia de ese periódico que es de hecho desde su fundación, de carácter podríamos decir progresista, siendo tildado de forma más o menos generalizada de ser el periódico del PSC catalán. Con motivo del conflicto territorial provocado por Rajoy, en su necesidad vital de captar votos para derrocar a Zapatero que le llevó a una política de oposición que consistía en el no a todo y, consiguientemente, a recurrir el Estatut Catalán refrendado en el Congreso, El Periódico ha tenido que posicionarse y lo ha hecho siguiendo las tesis españolistas, bajando sus ventas tal y como bajaba la representación política al mismo tiempo del propio PSC. Y digo esto para que se pueda entender mejor que no es imparcial, que ha tomado partido por una de las partes en conflicto y que eso no le va bien para su caja.

Con estos antecedentes, que son importantes y que no hay que menoscabar porque nos demuestra la línea política seguida por ese diario, tenemos que, una semana después de los atentados en Catalunya, El Periódico se nos destapa con una exclusiva (igual a pasta gansa), en la que emiten una nota supuestamente oficial de los servicios secretos yankees, que advierte acerca de una información, no corroborada como la misma nota indica, relativa a la posibilidad de un atentado en Barcelona y, lo que es más inusual, concreta hasta el lugar: Las Ramblas. Después de toda la polvareda levantada ayer, hoy nos vuelven a emitir otra nota, fechada el 21 de agosto, 4 días después de los atentados, de la NCTC al Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) español, en la que remiten el texto que supuestamente enviaron a los Mossos advirtiéndoles de los atentados. Yo no sé si existen precedentes de este tipo, en los que una agencia yankee posteriormente a un atentado en un país extranjero, envía una nota que acusa indirectamente a un determinado cuerpo policial; pero vamos a darlo todo por bueno, por creíble, por veraz. Hagámoslo, a pesar de las múltiples lagunas y contradicciones, tiremos de open minded y seamos receptivos a lo publicado.

Nada de todo esto, ni siquiera la supuesta exclusividad de los Mossos en materia de seguridad ciudadana, niega otros hechos tan relevantes o más aun que estos: las competencias en materia de lucha antiterrorista son estatales, que al igual que los Mossos, tanto Policía Nacional, Guardia Civil, CNI y por supuesto y por cuestiones de jerarquía el gobierno español, eran conocedores de esa nota y que todos, absolutamente todos, la descartaron por poco fiable. Repito: todos. Y me imagino, y no soy un lumbreras para imaginármelo, que en ocasiones se descartan líneas de investigación que no son corroboradas como la misma primera nota de la NCTC señalaba, acerca de la información que esta enviaba, no solo a los Mossos, sino a todas las fuerzas de seguridad españolas, el servicio secreto y naturalmente al gobierno español. Parece incuestionable, por tanto, que todos fueron conocedores al mismo tiempo de la misma información y que todos la descartaron como en otras ocasiones se descartan otras informaciones. Rutina, se llama. Y como un periodista debe saber que su abc es contrastar la información que pretende dar, un policía tiene que contrastar y corroborar que hay indicios para abrir una línea de investigación. En este caso no la había para nadie, no solo para los Mossos: para nadie porque nadie investigó ni nadie hizo nada.

Lo que yo me pregunto, sabiendo de que va El Periódico de Catalunya en cuanto a su línea política editorial, es qué a santo y cuento de qué, los de este diario focalizan la atención sobre una posible laxitud de los Mossos en exclusiva, cuando y dando por bueno que recibieran esa información, era una información compartida y compartida igualmente la desatención por parte de todos. No solo esa tendenciosa forma de focalizar las responsabilidades no soluciona nada, sino que lo que contrasta, una vez más, es la falta de colaboración entre los diversos cuerpos de seguridad del estado, entre los que existe en ocasiones un fuerte y arraigado corporativismo que les ha llevado en más de una ocasión a sonados, públicos y lamentables episodios, que no dejan de ser un fiel reflejo de lo que somos como país: una casa de depravación y latrocinio. Con perdón. ¿O es que acaso pretende hacernos creer El Periódico que la NCTC yankee informó, solo y exclusivamente a los Mossos, pasándose por el forro la cadena de mando estatal y al servicio secreto y gobierno de la nación? A ver si Catalunya va a ser ya un país independiente y por aquí no nos hemos coscado siquiera. Y ahora ¿quién está haciendo política con el atentado? ¿quiénes son los que, desde una línea política determinada y perfectamente establecida como la que mantiene El Periódico de Catalunya, que es parte interesada políticamente en que fracase el proceso independentista; quienes utilizan el atentado para desprestigiar al rival político, para, en definitiva, hacer política? ¿Quién está fomentado más ruptura, enconando más las posturas, tensando más aun la cuerda? ¿O es que hay que contrarrestar los elogios recibidos desde el exterior hacia los Mossos, por la resolución del caso con prontitud y eficacia plena, no vaya a ser que se nos vengan arriba? Una información recibida en el mes de mayo, que todos descartaron como igualmente se descartan tantas y tantas que no son corroboradas como la misma en cuestión indicaba en su texto, es usada ahora para criticar a los Mossos de no haber hecho nada al respecto. Espero que, con todo, no le llamen ahora a esto periodismo veraz de investigación porque, entre otras cosas, hay que destacar que el mismo diario reconoce estar al tanto de la información desde el mes de mayo. Otros que también lo sabían y no dijeron ni mu. Lo dicen ahora, a toro pasado y se marca El Periódico un Pilatos. Significa entonces que todos aquellos de El Periódico de Catalunya que estaban al corriente, enviaron a sus familiares y amigos fuera de Barcelona y en cualquier caso ni acercase por Las Ramblas, callándoselo a todos los demás. Y nadie se chivó. No se corrió la voz. No se enteró ni dios. ¿O no será que le dieron la misma importancia que todos los demás? Y si es así ¿por qué culpar ahora directamente a quienes han sido los que han acabado con los terroristas y felicitados por ello, cuando todos los conocedores de la advertencia le habían dado la misma importancia; o sea: cero? ¿O es que acaso sibilinamente El Periódico no está diciendo que había una conspiración fraguada en el seno independentista, que de alguna manera facilitara la ejecución de un atentado para que así la policía autonómica pudiera dar al mundo a conocer lo chula que es? Pues nada: señores de El Periódico de Catalunya, bienvenidos al club de los conspiranoicos.  

Me voy a cagar en la leche hasta que sea cola-cao. Y yo que pensaba que el único gilipollas era yo...esto un pue sé, José. Vete de weekend al sofá, enchufa la Play, ponte a 380 km/h en La Sarthe y relájate… y un huevo te vas a relajar a 380 km/h, gilipollas: que te vas a matar, ¡animal!En una sartén a 380 km/h: tú estás colgao! Unas hostias, nen…uff. Pavernos matao, payo, mala puñalá te den con esas ansias de correr patos laos, que un día te vas a salir de la tele, joío. Tú míralo: a punto jubilarse y jugando con la maquinita, el yayo… además, testas quedando calvo, macho…que asco de tío, pol dio.

A más ver