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viernes, 7 de septiembre de 2018

DIADAS




Alrededor de mil efectivos más de los miembros de la fuerza bruta del estado español, han sido destinados a Catalunya con motivo de la celebración de la Diada del 11-S y la conmemoración del primer aniversario del 1-O. Y dirán que, como así ha sido efectivamente, el Presidente Torra, tetorra no, presidente, separado, Torra, memo, ha llamado a la movilización del independentismo en las próximas jornadas. Claro. Es que tampoco hace falta que nos llame a la movilización. Ya somos mayorcitos. Es más: llevamos décadas celebrando el 11-S sin el más mínimo altercado, no es de esperar que este los haya, porque este 11-S será como todos los demás: un día lúdico-festivo-reivindicativo y familiar, como tantas y tantas “Diadas” en Catalunya, para las que no hemos necesitado llamamientos a movilizarnos. Eso es lo que más le duele al fascismo más recalcitrante de las Españas: que no haya violencia que justifique su represión del 1-O. Esperan con todo fervor que desde aquí se responda a la presencia de la fuerza bruta española con violencia, con altercados y enfrentamiento. Pero se van a comer lo que se comió Clavijo. No vamos a caer en sus provocaciones. Vamos a ignorarlos, a pasar olímpicamente de ellos. A lo nuestro. La previsión meteorológica para el próximo martes día 11 en Barcelona nos indica una temperatura mínima de 21 grados y una máxima de 27. Una mañana soleada con algún intervalo nuboso por la tarde que no arrojará precipitaciones, así que un día ideal para salir de fiesta a pasárselo bien, luciendo cada cual lo que se le antoje, del color que se le antoje y reivindicando lo que le salga del alma. Vamos a ver quien se lo pasa mejor, si aquellos que se reúnen para cantar, entre otras cosas, Els Segadors a capela, o aquellos que critican, maldicen y blasfeman como único argumento, impotentes, desdichados e infelices, que los primeros se lo pasen pipa. No faltará, evidentemente, quien vuelva a insistir en que tras la celebración de la Diada se ha podido constatar que el independentismo está muerto porque han dejado de acudir unos 18 o 19 indepes. Cada cual es muy libre de soñar lo que quiera. Algunos hasta pueden tener pesadillas a la carta, como el tal Herman Terstch ese, que ahora que financia a Podemos debe sufrir un trauma de cuidado, ya que una sentencia ratifica que debe pagar a Podemos 12 mil euritos de nada por un pleito que ha mantenido por difamar al pobre abuelo de Pablo Iglesias, que ya me contaras qué le habrá hecho el pobre abuelo al fachoso ese. Viven en, por y para la crispación, el alboroto y la bronca. Pero aquí les vamos a demostrar que no solo estamos por otras cosas, sino que somos de otra pasta; ni mejor ni peor: distinta. Tan distinta como pueda serlo la de los vascos en relación a los gallegos, o la de estos en relación a los andaluces: nada que ver. Siempre he dicho lo que por otro lado es una obviedad: que España es una ensaladilla rusa de caracteres, culturas y sociologías diversas; y que eso que nos podría enriquecer, está siendo utilizado por algunos para provocar esta situación, que les reporta no pocos beneficios políticos. Esa fue la quintaesencia de la filosofía rajoniana, y el legado pervive porque la situación ha llegado al punto de no retorno en el que nos encontramos. A mi al menos me da la sensación de que hemos traspasado ese punto de no retorno, porque nadie va a dar su brazo a torcer. Ni debe, todo sea dicho.
                                                                 

Los unos porque es comprensible que quieran preservar la unidad de la patria, que no por amor a ella sino a los números que arroja de beneficios; los otros porque por razones diversas han tomado una decisión, libremente, que implica llevar a cabo un proyecto que les une e ilusiona y del que no van a desistir, ni deben, por dignidad, sobre todo tras el 1 y 3 de octubre pasados. Emulando a ese gran pensador contemporáneo, prestigioso catedrático de la materia gris y Doctor Honoris Causa de la Filantropía Ecuménica por la Universidad de Por Mis Olivillas, Don Eme Punto Rajoy: “Pues mire usted, si se ha roto un vaso, pues un vaso se ha roto, ¿qué quiere usted que le diga?”. Valiente HDLGP, que ha dejado esto hecho unos zorros y vive sonriente y feliz con su jubilación dorada ideal; tan ideal, que se la ha preparado a conciencia para reírse al cuadrado, reformando la ley y el régimen de los registradores de la propiedad cuando gobernaba, para ampliar su campo de competencias, ergo sus beneficios. Pero a ti te han dicho que te centres en los lazos amarillos, los semáforos amarillos, los coches amarillos, los relojes, paraguas, camiseta, calcetines…es el color maldito,  y eso es lo único que te debe importar. Ya está tardando, por cierto, el Pedrito Sánchez y sus secuaces en hablarnos de la “herencia recibida” del PP en el asunto catalán, aunque deberían hacerlo con la boca pequeña, porque al final los sociolistos eran unos entusiasmados alentadores de ampliar las medidas represivas bajo el paraguas del 155, y no han perdido ocasión de amenazarnos a los catalanes desde que el republicano monárquico ese está en la Moncloa, con la cantinela de siempre pueden volver a aplicarlo, como le exige el Albertito con todo entusiasmo. Pero como digo, más allá de la teatralidad de las declaraciones de unos y otros, los gobiernos de Madrid y Barcelona están sometidos a la temporalidad de sus breves legislaturas y parecen más concienciados y convencidos en quedar lo menos mal posible, antes de que hacer las cosas bien. Torra y su equipo está haciendo política autonomista en Madrid, entre otras cosas porque en algo tienen que ocupar su tiempo; pero sabe perfectamente que su objetivo político es uno y está bastante claro, a pesar de los acuerdos a los que llegue con el inquilino de Moncloa y de los recursos que retire este del TC a las leyes catalanas que en su momento recurrió Rajoy, objetivo que ya le ha marcado y dejado más que claro a Sánchez, y que no es otro que el referéndum de autodeterminación. Pero si Torra no quiere verse abocado a adelantar las elecciones en Catalunya, deberá convencer, que ahora mismo no sé cómo, a los de la CUP en las negociaciones de los próximos presupuestos de la Generalitat. Y digo que no se cómo porque la CUP, lo primero que le va a decir, es que deje ya de hacer política autonomista con Madrid, y le va a exigir, si es que quieren preservar su propia coherencia interna los de la CUP, unos presupuestos conformes a un estado republicano independiente, o no habrá apoyo a los presupuestos. Si apoyaron a Torra en su momento es porque al final vieron claro los de la CUP que para hacer cualquier cosa era imprescindible que retirasen el 155 y recuperar el control del Govern y las instituciones catalanas. Una vez conseguido esto, para los de la CUP el paso siguiente es la implementación de la república y de políticas republicanas, nunca y en ningún caso autonomistas.
                                                                 

Lo importante, ahora mismo, es que la Diada transcurra con toda naturalidad, que no caigamos en el juego de sus provocaciones y que la jornada transcurra por los cauces normales. Los más ilusionados con que haya bronca, evidentemente, son los acólitos del Rivera y la Arrimadas, que no me extrañaría nada que a estas horas estén haciendo planes los fascistas violentos para intentar provocar disturbios, que arrojen unas imágenes que justifiquen el relato ideal que les convenga, cosa de la que ya se encargarían los medios de comunicación afines a la causa española de presentar debidamente al mundo entero, para que vea todo el orbe  cómo son de violentos los catalanes independentistas. Crear esos problemas de convivencia en Catalunya, de forma real o ficticia, solo les interesa a unos. Los fascistas de Mussolini, creador del movimiento y del primer partido fascista, se deshacían de sus rivales políticos a palos, así que forma parte del ADN del fascista agredir y actuar de forma violenta para obtener sus fines políticos.  

Vosotros mismos.

A más ver  

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