Si no es que me apetezca
especialmente refocilarme en la guasa y el pitorreo, sobre todo a raíz de la
nueva negativa de la justicia belga a entregar a un reclamado de la española,
porque el delito del que se le acusa no está contemplado como tal en Bélgica. Y
claro, la derecha cavernícola española, en vez de ver la viga en su ojo, lo
único que ve es la paja en el ojo ajeno, hasta el punto de que andan ladrando,
otros rebuznando y alguno más llorando, que Bélgica es un problema para Europa,
porque da refugio a delincuentes. Al mismo tiempo, hace unos días, la justicia
española volvió a denegar la extradición a la justicia suiza de Hervé Falciani https://elpais.com/politica/2018/09/11/actualidad/1536655588_425151.html
, sin que por lo visto nadie haya
acusado a la justicia española de nada: ni de cargarse la soberanía judicial
suiza, ni de que España sea un peligro para Europa, ni de ser la nueva isla de
La Tortuga, aquella en la que se refugiaban los piratas; aunque tengamos en España
una nutrida representación de prácticamente todas las mafias del mundo mundial,
siendo presentada la noticia por los medios informativos de aquí, deprisa y
corriendo, en un espacio menor, como quien nos dice que después de hoy, viene
mañana: con toda naturalidad, como si fuera una cosa que pasa cada día. Y,
realmente, pasa muy a menudo que se deniegan esas entregas, por defectos de
forma o porque el delito en cuestión no es tal delito en el país al que se le
reclama la entrega. Lo vivimos con Puigdemont en Bélgica y Alemania, y lo hemos
vuelto a corroborar con Valtónyc en Bélgica de nuevo, siendo esta vez la
Audiencia Nacional quien reclama, y no el Tribunal Supremo. Dice un proverbio
que el necio es tomado por sabio cuando calla. Pues eso. Desde la Audiencia
Nacional surgen vituperios e improperios de todo tipo hacia la justicia belga
y, entre ellos, una oscura resignación que los lleva a plantearse desistir de
albergar la esperanza de una resolución favorable, en el recurso presentado por
la fiscalía belga en representación de la Audiencia Nacional. Hablando de rebuznos,
rebuznaremos que la otrora jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela,
aquella…sí: aquella misma, la que iba a por el sedicioso Mayor de los Mossos,
Josep Lluís Trapero, y con él todo independentista que se le pusiera a tiro,
que por sus servicios a la causa ha sido elevada de categoría, pasando a ocupar
la plaza en la fiscalía del Tribunal Supremo, pieza, dicho tribunal,
orgasmástica en la vida de todo jurista español y mucho español. La plaza que
ahora ocupa Lamesuelas; perdón: quisir Lamela, la dejó vacante el fiscal Maza,
aquel que se fue a Sudamérica a morirse un fin de semana vaya usted a saber
cómo y porqué, después de liarla bien liada con la imputación y encarcelamiento
de los líderes políticos catalanes; su vida, la de la ex jueza y ahora fiscala,
parece por fin haber alcanzado la cúspide, el puntito aquel…guay. Fijo que lo
del fiscal fenecido ha sido la mafia de
los Pujol, nen, porque ahora que se ha descubierto que Catalunya es la nueva Arabia
Saudí europea del petróleo, nen, se quieren apropiar de todo el crudo que dicen
que hay en Catalunya y el mediterráneo, hasta las Baleares, mogollón de
galosina, nen. Será Gasolina. Ya; pero galosina suena así como más dulce…no? No
divagues. ¿Qué no te gustan los divanes? No…que eres un sardanápalo, así que disfrútalo
y estate un rato calladito, anda, criaturita. Petróleo en Catalunya, el último
hit en conspiraciones…que sí, nen, y la cadena montañosa de Montserrat, por
dentro está llena de oro, nen. ¿Qué hacen allí los curas, si no? La virgen
aquella negra en realidad era una aldeana que se cayó un día a un pozo y
descubrió el oro, y al salir tenía la pobre toda la cara sucia y eso. Por eso
la cogieron y la convirtieron en un icono, y de ahí a virgen solo es un trámite,
nen. Ya, como la inmatriculación de la catedral de Sevilla, quieres decir.
Joder nen, que listo eres, me dejas adodanado…quieres decir anonadado…ah, pues
si no quieres nadar, no nades, yo no he dicho nada de nadar. Esto…pasa de mí un
ratito, tío chufla, con esa cara aljofifa que tienes.
Otro que se ha paseado, un ratito eso
sí, ha sido el ínclito Ansar, o Aznar, por el congreso, (La Momia 2, próximamente
en cines 3D), para responder a las preguntas sobre la financiación de su
antiguo PP, ya que ahora no milita, pero como es obvio conserva en sus genes la
particular idiosincrasia pepera: los malos son siempre los del P$OE, el no sabe
nada de una contabilidad B en el PP, no le consta, nunca hizo negocios con
Correa, su partido nunca ha sido condenado por nada ilegal (la sentencia del
caos Gurtel está recurrida por lo que aun no hay sentencia en firme); y a él, a
diferencia de otros, nunca le han llamado para declarar ni como imputado ni
como testigo, en clara alusión a la rata traidora del Rajoy, que después de
todo lo que hizo por él, le pagó con su desprecio, el muy ingrato. Ah, y sabe
muy a ciencia cierta que, como es natural, Catalunya tiene armas de destrucción
masiva, como los lacitos amarillos esos, que tienen una composición química que
en contacto con el aire reacciona, se expande y mata a la población entre
grandes estertores de agonía y muchos sufrimientos, entro otros, anales y nasales…fíjate
tú, si son malos estos catalanes.
De lo del Pedrito pedete Sánchez y su
cacareada reforma exprés de la constitución para cargarse el aforamiento de los
señores y señoras diputados-as, nada que decir, más que la enésima tomadura
global de pelo, y la evidencia de la teatralidad de la política, porque el
individuo este sabe perfectamente que no va a prosperar, ya que necesita, sí o
sí, el apoyo del PP que no lo va a tener, porque el PP solo va a admitir una
reforma constitucional si la proponen ellos, no otras reformas de otros, habida
cuenta de que la derecha de este país vive entre las mullidas nubes de la
Verdad Absoluta desde tiempo inmemorial, y naturalmente todo lo que hagan y/o
propongan los demás, ni tiene sentido, ni sirve para nada de nada y es muy y mucho
antiespañol.
Pero pisha, a ver, mi arma: en Catalunya,
¿hay o no hay república? Lo digo porque ayer estuvo el tal Felipito uve palito
por ahí… ¿ah, sí? ¡Por dios! No te puedes ni imaginar cuanto no, cuantísimo que
lamento haberme perdido un evento de semejante calibre y envergadura. Ya no sé
si vivir más, figúrate, porque mi vida acaba de perder su razón de ser, ya que
ahora no podre comer, ni beber, ni dormir, ni respirar sin poder decir viva el
rey. ¿Qué va a ser de mí, triste pecador, sin esa figura, sin ese referente
moral, espiritual, humano…? por dios que trauma tengo, que me voy a caer de la
silla como siga gimiendo y ladeándome de esta guisa…
A más ver
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