Hay gente, digirámoslo, que no
razona. Gente obtusa que vive en, por y para el bucle discursivo de su relato,
y da igual lo que le demuestres y todo el peso que puedan tener tus argumentos,
que no salen de ahí porque es el discurso que han construido en su fabulación
para sentirse fuertes en una posición que creen la correcta. Pasa mucho cuando
escuchas a tertulianos, periodistas y creadores de opinión que, por ejemplo,
defienden a capa y espada la gestión privada ante la pública porque, dicen, la
privada es más eficiente. Es, evidentemente, un burdo rumor, una simple leyenda
urbana; otra rubia en otra curva. Un servicio público X, no lo hace más
eficiente la gestión privada por el simple hecho de ser privada: lo hace
eficiente, como en el caso inverso de la gestión pública, las personas, su
profesionalización, su trabajo. Podríamos poner infinidad de ejemplos en los
que, la privatización de servicios públicos, el único beneficio que ha arrojado
ha sido para los dueños de esas empresas privadas, amén de un deterioro del
servicio, cuando no un encarecimiento por la creación más o menos solapada/descarada
de un oligopolio chantajista. Ahora, llamemos gilipollas a los parisinos, por
ejemplo, que después de años de titularidad privada del servicio de aguas de la
ciudad, el ayuntamiento ha decidido volver a gestionarlo a través de la
alcaldía. Nuestras eléctricas, por ejemplo, antes públicas ahora privadas:
¿estás contento, tú, ciudadano tipo, con la privatización del sector energético
en nuestro país; te ha hecho feliz el último recibo de la luz, qué tal el
orgasmo que te proporciona la gestión privada, mola, verdad? Y como a la
inversa podemos decir otro tanto de servicios públicos que no funcionan como
debería, algo por lo que, en buena lógica, debe colegirse, es que no es ni la
gestión privada ni pública, per se, las que hacen bueno o malo un servicio;
sino las personas que los gestionan de una forma determinada: mal, en muchos
casos. Mal evidentemente para los intereses de esos usuarios. Aeropuerto de El
Prat en Barcelona: ¿Qué tenemos?: tenemos una gestión en manos privadas del
servicio de control de pasajeros. Si los trabajadores contratados por esa
empresa privada, Eulen, hacen lo que es escrupulosamente su trabajo; esto es:
asegurarse de que no se introducen objetos prohibidos en el avión, la cantidad
de operarios registrando maletas y bolsas de mano es manifiestamente
insuficiente y se forman las colas que se forman. Si, por el contrario, son más
laxos en el control, la cosa va más rápida y el mundo parece más bonito para el
usuario; pero se descuida la vigilancia con el riesgo que eso puede conllevar y
las posibles lamentaciones posteriores que nadie desea ¿verdad? Cuando se hace
una oferta pública de un determinado servicio, la oferta más barata no tiene
necesariamente que ser la mejor, debido y entre otras cosas a que ese
abaratamiento es fruto, sin duda, de un peor servicio o un servicio deficitario
para el usuario de ese servicio, para el trabajador que proporciona ese
servicio o para ambos, que es donde radica el beneficio empresarial final. Los
flujos de pasajeros en nuestros aeropuertos en época estival ya están
absolutamente estandarizados y sabemos que registran un aumento considerable
por razones evidentes. Esto, por tanto, es una parte del problema: una empresa
que para adjudicarse la contrata hizo una oferta barata, basada en la
deficiente ejecución de un servicio y la falta de previsión, al que le falta
personal cualificado para atender debidamente ese servicio. La otra parte del problema
es, evidentemente, pecuniaria. La anterior empresa que gestionaba ese servicio
era Prosegur. Sus trabajadores cobraban de media casi 300 euros más que los
actuales operarios de Eulen. Estos no llegan a ser ni mileuristas y piden una
subida salarial de unos 36 euros al mes, si no recuerdo mal ahora mismo, un
refuerzo de la plantilla que evite la imposición de jornadas extenuantes con
horas extras que, o ni se pagan en algunos casos o se pagan tarde, jornadas
maratonianas que provoca bajas por stress que no siempre son suplidas, y otra
serie de reivindicaciones inherentes a la condición de trabajadores de un
aeropuerto, como el plus de 250 euros. Son reivindicaciones justas, entiendo
yo. Modestas, incluso. Y son el reflejo, no ya de una deplorable gestión
privada de un servicio público de la trascendencia que tiene uno de los
principales aeropuertos de esa industria española del turismo con la que tantos
se llenan la boca, sino que refleja y queda retratado el país de Yupilandia de
la clase trabajadora, con sus abusos, sus explotaciones laborales y este marco
legal nocivo para el trabajador y protector del esclavista, del usurero y de la
rata. Ya no entro a valorar, no sea que me creáis más sectario de lo que ya
soy, el porqué de entre todos los aeropuertos en los que opera esta empresa, Eulen,
en España, 27 nada menos, cuya principal accionista está vinculada al PP, el
único conflicto que se está registrando en los aeropuertos sea, justamente,
el de Barcelona. Debe ser que aquí en Barcelona, como somos tan modernos y
estamos enfebrecidos por el diseño, soñamos con diseñar un mundo caótico en el
que predomine el desmadre, el despelote, el fornicio por las esquinas, la
fiesta perpetua y el tralará. Cuando muchas casualidades confluyen en el espacio
tiempo en un punto determinado, no se…quizá es que la cosa globalmente vista no
te diga que es el fruto del mundo de lo casual y sí de lo causal. Que hay una
razón para esa confluencia y no es la casualidad. Nuestro problema, el de todos
nosotros en conjunto y en el conjunto de país como tal, no es Rajoy,
Puigdemont, los catalanes…no. Esos son los síntomas: la enfermedad es esta
derecha nuestra, la carpetovetónica española y la súper guay catalana,
podridas, corrompidas, embusteras y ladronas. ¿A quienes están enviando los
jueces al talego, a los podemitas, a los rojos comunistas, a los del Joan Tardá
y su Rufián?; ¡calla!: deben ser jueces rojos o reconvertidos al podemismo
morado, un atajo de traidores a España… ¿y si ponemos un chiringuito y vendemos
salvapatrias y traidores? Mira que llegamos a producir ¿eh?: el stock amenaza
con matarnos de éxito.
Y un apunte más, que no por repetido
hay que obviar y sí refrescarles la memoria a alguno, que parece vivir en el
despiste, a veces de forma consciente, no empero: como en el punto anterior,
algunos viven en una falsa creencia: al catalán que reivindica el referéndum no
ha habido un político que le haya comido el tarro. No están, no estamos, ni
jaleados, ni teledirigidos, ni inducidos, convencidos ni engañados por un solo
político en esa reivindicación, porque la reivindicación viene de abajo hacia
arriba, era antes de que la extinta CiU viera en la reivindicación la formula
de salvar el culo en las elecciones, el flotador al que aferrarse antes de
ahogarse; un independentismo en el que la derecha catalana ni nunca ha creído
ni nunca ha querido; hasta ahora que ya se ha abierto la caja de pandora y la
radicalidad y el extremismo pepero han roto los lazos de dialogo que sostenían
la gobernabilidad territorial. Todo relato que obvie el hecho empírico de que
la reivindicación soberanista nació de la iniciativa popular a través de
asociaciones como la ANC, Omnium y
otras, nace tarado, obvia el origen y tiende a atribuir cosas a quienes no
corresponde, a los sumados al carro a última hora. Un argumento ese de
atribuirle cuasi que poderes mágicos de encantamiento a una derecha catalana
que no se corresponde con la realidad; es más: se contradice absolutamente
cuando vemos la caída irremediable en votos de esa derecha, hecha añicos por el
proceso soberanista, con la antigua Unió Democrática finiquitada por mor de ese
proceso independentista, arrastrada esa derecha al fango por la saga de los
Pujol, que en las próximas elecciones va a perder el Govern de la Generalitat
para pasar a manos de Esquerra Republicana, según todos los sondeos. Esto que
digo y afirmo no es que sea cátedra de la que deba emanar todo lo demás; pero
es lo más parecido a la verdad que yo conozco por lo que yo he vivido aquí
donde vivo, que no es otro sitio que Barcelona. Si tú posees datos de
declaraciones de políticos de CiU o de mítines de estos, previos a la diada del
11-S del año 2010, en los que jaleaban a la gente con proclamas y
reivindicaciones de independencia, de enfrentamiento con el estado español
hasta las últimas consecuencias, en las que se impusiera el extremismo radical
soberanista, lo fliparía mucho, de verdad. Quizá tengas algún video de Artur
Mas o del Pujolet envueltos en la Estelada declarando, palo en mano, la guerra
a España y gritando como posesos en catalán: ¡in-inde-independència…! ¿veritat
que no el tens, maco? (¿verdad que no lo tienes, guapo?). Lo que sí parece que
tienes son sobradas pruebas de lo que nos han estado robando esa derecha, allí
en tu España y aquí, en mi Catalunya. Brothers in arms, baby. Ya sé que jode un
poco; pero nos une la misma desgracia. Y yo ni quiero la tuya ni quiero la mía
porque lo que no quiero son ladrones, por lo que independizarnos quizá no nos
evite a los nuestros; pero sí a los vuestros y a vosotros, los nuestros. Hay
demasiado trasiego de chorizo, digámoslo así, y hace falta un ejercicio
espiritual de recogimiento, de contrición que nos acerque a la pureza. Ora pues
conmigo, hermano, y penitenciagetémonos juntos. J Que no me voy a justificar: quiero la independencia de España y vivir en
una república por pura hartura, padre cura, y punto. No necesito argumentos
históricos pasados sino perspectiva histórica futura y, en ese futuro, prefiero
soñar con una quimera que vivir sometido a un podrido axioma.
La última estupidez patria que habla de lo mal
que andan algunos de la sesera: hacer noticia de que la Rosa Diez, aquella sí,
ahora ve conexiones entre Pedro Chanche y Madulo, ya tu sabe… y yo veo
conexiones entre Pablo Iglesias, el macho men, y el Tinky-Winky de los
teletubis: ¡van de morados! ¿Con este personal, a donde coño os creéis que
vamos? Cuando veas Itaca, ya si eso me avisas…
A más ver
Se lee fatal, busca otra fuente que no canse quizá Arial normal.
ResponderEliminarQue sin ánimo de ofender eh? me ha gustado el articulo pero los punto y aparte también molan. Te lo digo constructivamente y desde el respeto que mereces por publicar.
ResponderEliminarLo de la fuente míralo, ganará seguro.
Un saludo, Miguel. :)
Gracias por tu atención y tu comentario. No obstante, debo decirte que siempre escribo con Colibrí y en negrita, que lo veo mejor, y hasta ahora nadie me había dicho que tuviera problemas al leer. Sobre los punto y aparte...debe ser defecto de la lectura mia, que acostumbrado a leer psicología y filosofía me ha vuelto adicto a las parrafadas.
EliminarUn saludo y gracias de nuevo.
No hay de que, sabiendo que lo tienes controlado no hay problema, seguiré leyéndote, ya me acostumbraré :)
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