VIVIR EN BLANCO Y NEGRO

Naturalmente que no ha pasado desapercibida la dignidad con la que se presentaron, tanto los Jordis, como Oriol Junqueras y resto de comparecientes independentistas ante el juez Llarena estos días. Sánchez le dijo una obviedad: que no se puede ser juez y parte afectada, como el propio juez reconocía que se sentía, en primera persona del plural, en una de sus interlocutorias en la que deniega la presencia a Jordi Sánchez en el Parlament, por mor de la causa independentista. Cuixart le vino a reprochar que no se respetase la libertad ideológica en España, como parece evidente, y Junqueras ni le reconoció su autoridad para juzgarlo, y aspirar a la independencia y, promoverla, no le parecía al Vicepresident ningún delito, como no puede haber referéndums ilegales en un país democrático, unos referéndums que, además, los despenalizaron en su día Zapatero. Eso, entre otras cosas le vinieron a decir: en su cara, que se enterase bien el juez de que no va a doblegarlos, que son gente de paz y militantes del dialogo. Está dentro de la nueva estrategia de la defensa, que de ese modo quieren dejar constancia ante las autoridades europeas de la vulneración de sus derechos. Me imagino que, en las mentes y corazones de todos los detenidos, ha tenido que haber un previo proceso de asimilación, pero por la actitud de estos uno cree que ya tienen claro, no solo que no van a salir en libertad provisional, a menos que se dieran unas condiciones que ni soy capaz de imaginar, sino de que ni siquiera aspiran a tener un juicio justo, porque está bastante claro que no va a ser, precisamente, muy justo cuando ya de entrada se les mantiene en prisión de forma tan manifiestamente injustificada, y hay tantas voces de la ultratumba fascistoide pidiendo sangre, cautiverio y crucifixión. La nueva vuelta de tuerca de la judicatura podrida fascista (¿me he expresado, suficientemente claro, en castellano?) ha sido rectificar la euro orden contra Puigdemont por parte de la Sala II del Supremo, en la que, por lo visto, se les pasó a Llarena acusarlo de Sedición a Puigdemont, para incluir este nuevo delito en la euro orden, ya que, y siempre según la Sala II del TS, ha existido no solo violencia, sino que gracias a la presencia de las fuerzas del orden españolas, estas evitaron el 1-O una, cito literal, “masacre”, si el número de efectivos policiales hubiera sido considerablemente mayor; aunque no especifican, sin embargo, por parte de quien, con que medios, métodos, planes se hubiera llevado a cabo tal masacre, porque lo digo yo. Y punto. Según la RAE, la definición del término Masacre es: Matanza de personas, por lo general indefensas, producida por ataque armado o causa parecida”. Siguiendo la línea argumentativa de la Sala II del TS, a mayor número de agentes mayor posibilidad de masacre; a menor cantidad, por tanto, menor posibilidad y, ante la ausencia total, absoluta imposibilidad de esa llamada “masacre”. ¿A quienes evitaron las fuerzas de seguridad que fuesen masacradas?; ¿masacradas por parte de quien?; ¿y masacradas, con qué armas? Si se evitó una masacre ¿cómo es que no se ha llevado a cabo una investigación, no hay detenidos, sospechosos, armas incautadas, no se…?de repente, aparece un nuevo término en el relato, con la exclusiva finalidad de hacer creer que aquí el 1-O se podía haber liado la III Guerra Mundial. De la que ha salvado al mundo la Poli española… ¿y solo una medallita de recompensa y una subida de 500 euros en la nomina? No sé yo si le llegará la subida a todos o será selectiva; ya lo dirá la propia policía en todo caso, si se han ganado esos 500 euros, tanto los armarios que van por ahí repartiendo leña, como los oficinistas uniformados. Espero, no obstante, que los jueces alemanes se cercioren de cómo los jueces españoles les quieren tomar el pelo: en la traducción al alemán que han hecho para los jueces teutones desde el ministerio de justicia español, no han incluido la frase en la que el juez Llarena dice que ha sufrido, en primera persona, los embates del movimiento independentista, lo que,  traducido al romano paladino, quiere decir que eso, declararse un juez parte afectada por los hechos que se recogen en un sumario, lo inhabilita para la instrucción del sumario por erigirse en juez y parte. El abogado de Puigdemont, de todos modos, ya les ha hecho llegar una traducción jurada e integra de la interlocutoria, en su versión original, para que las contrasten. Pero es que hay más: después de reconocer en la interlocutoria que no ha habido violencia, no al menos la suficiente que justifique la acusación de rebelión, para justificar el relato que de pie a la acusación de sedición, no se les ocurre otra cosa que esgrimir el argumento de que más de dos millones de catalanes fuimos abducidos, inducidos de alguna forma mágica a votar, todos, como poco menos que peleles sin criterio. ¿Cómo demostrar, fehaciente y empíricamente esa…se me hace difícil adjetivarla, conjetura, hipótesis, ensoñación, estupidez? Este tipo de cosas las podemos decir, por aquí, en las redes,  los particulares que somos como somos, con respecto a quienes votan a determinados partidos y no queremos profundizar en las causas que les llevan a ello, que siempre son variadas, como la misma variedad del votante; pero argumentar tal cosa en un auto judicial es, cuando menos, para descojonarse, además de ser toda una demostración palpable de que algunos jueces han perdido totalmente el norte y actúan movidos por los resortes de su ideología, obviando los hechos y construyendo un relato digno del rey midas del cine, el señor Spielberg. Es difícil hacer más el ridículo en Europa. Quizá la camarilla de jueces adheridos a la causa de la salvación de la patria, sea españolizar el sistema judicial europeo, hasta el punto de que en Europa solo vean, lean, interpreten y actúen como pretenden los jueces españoles, a los que se la repampinfla el ordenamiento europeo y las leyes de cada país, que son las que son. Como guinda del pastel, que es que están que se salen sus señorías del TS, el delito de sedición por el que ahora pueden pretender que se detenga y extradite a España al señor Puigdemont, al parecer está derogado en Alemania desde 1.970…
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Todo este…embrollo, galimatías, todo este guirigay judicial que está sometiendo a la justicia española a un descredito en Europa sin precedentes en “democracia”, es alentado en buena medida por los medios de comunicación afectos a los relatos fantásticos y que repiten,  machaconamente, los mismos epítetos y calificativos, con la intención de que queden en la memoria de la gente quienes son, según esos medios, los violentos, los golpistas, los terroristas, los rompedores de la maravillosa, esplendida y divina de la muerte, unidad nacional. Y como hay gente para todo, también hay gente para creerse la versión oficial de la vida sin cuestionarse nada, sin hacer la menor autocritica, como esos poseedores de la verdad absoluta de las cosas que van por la vida sentenciando, adjudicando culpas y perdones, como quien lanza caramelos desde una carroza real la tarde-noche del 5 de enero. Y, obviamente, cuando la sesera ya ha bullido lo suficiente en base a sus posibilidades primarias, dan paso al primate que llevan dentro y que, como argumento, solo encuentra el insulto y la ofensa. Como si uno tuviera la culpa de las cagadas catedralicias de esos salvadores de la patria togados que, por obviar, hasta obvian cuantas veces se han  denegado en España las euro ordenes de otros países europeos, y nadie ha puesto en cuestión por ello ni a Europa ni la soberanía de cada cual, soberanías que hoy llegan donde llegan, recortadas por las normativas jurídicas y el derecho europeo. Ya me hubiera gustado a mí, qué se yo, que los jueces y tribunales españoles hubiesen defendido, con tanta vehemencia, la soberanía española, asaltada a golpe de reforma del art. 135 de la constitución, que merma infinitamente mucho más nuestra soberanía que una orden de detención y extradición. Nazis como León Degrelle encontraron refugio en España y aquí vivieron plácidamente hasta el fin de sus días. Y como en el caso de este belga, reclamado por las autoridades belgas ¡durante 15 años! y posteriormente juzgado en rebeldía y condenado a pena de muerte por su colaboración con los nazis, nadie tomó represalias de ningún tipo contra España, y eso que hasta enviaron a un sosias del tal León Degrelle, por si colaba…

                                                                                

Disfrutad de la primavera y, 

A más ver